martes, 13 de julio de 2010

Un juego


y jugaron a engañarse, engañar los corazones y esconderse de los sentimientos, con un poco de miedo se tocaron lentamente con las miradas fijas, ella llevaba un vestido rojo,muy simple , pero hermoso, sus pies se encontraban descalsos, el pecho de aquel hombre estaba descubierto, y con las manos grandes le rodeaba el cuerpo, sus miradas seguían fijas , jugaban juntos a las escondidas, los sentimientos eran quienes contaban, por mas que intentaban ocultarse, el amor siempre los encontraba, pero luego corrían juntos para esconderse mejor, no querían amor, buscaban libertad, no era el momento preciso para el amor, ambos tenían corazones con trozos en el suelo y manos que no querían recojerlos, a veces cada uno se sumergía en sus lágrimas y se ahogaba en las de otro, la lágrima de ella, llamaba a la de el y ambos abrazados con fuerza lloraban a gritos. El no quería quererla, pero ella se estaba dejando pillara por el amor, ahora no corría lo buscaba con la pequeña ilusión de que el también la amara, pero el corría detrás de los recuerdos y se aislaba al menos una vez por semana intentando alejarla, mostrándole que su vida es miserable que no es mas que un payaso suicida que quiere magia pero busca el odio,que llora solo y no se deja ayudar que le gusta nadar en el pasado, pensando en las cosas que ya no puede arreglar, pero el no se da cuenta que es ahora cuando puede arreglar e intentar de no cometer los mismos errores que aquella vez que lo marco, no se da cuenta que si no lo hace hoy , cuando mañana esto sea pasado, llorara por su error, pero esta bloqueado y necesita ayuda pero tiene rejas en el cuerpo alambre púa lo rodea, ella lo abraza y se hiere el cuerpo, pero no le importa intenta con todas sus fuerzas quitarle estas trampas y mostrarle el sol que sale cada mañana, pero el no quiere mirar esta encerrado en su cuarto oscuro con las cortinas cerradas.Hay día es donde ella se rinde se sienta a los pies de la cama y solo fuma, mientras el duerme, las lágrimas en ese rostro pálido ya cansado de tanto luchar, y los ojos destruidos, con la mirada de niña casi perdida piensa en su antiguo amor, ese que la dejo ese que la ve cada día sin mirarla, llora, llora sola porque no hay quien la consuele, ella es usualmente la que consuela, no quiere ser incoherente y decir sonríe mientras ella llora, ella como buena actriz sonríe al publico y llora sola cuando nadie la ve llora pero luego ríe, ríe a carcajadas, piensa que la vida es muy corta y que quizás mañana ya no pueda amar, apaga su cigarro y una vez mas intenta ayudar aquel muchacho pero el esta atado y no quiere salir..............el vestido rojo se ha desgastado ya no ilumina, no es mas que una princesa con arapos en un castillo viejo y dañado, donde busca a un sapo, que jamas sera un príncipe, pero así le gusta...el juego a terminado la pinta y la escondida han ganado el amor la a capturado...................el muchacho la mira, los ojos le brillan, pero no acepta que la quiere a su lado, ella ya no soporta mas, toma sus pequeños zapatos y sale de aquel castillo dañado , con su vestido convertido en un arapo desteñido, mientras se aleja mira la torre mas alta, donde se encuentra su amado, lleva caminado horas, quizás días, al parecer esta enferma, su cara esta pálida y su piernas heridas, camina sin rumbo, no sabe que quiere, hay días donde quiere regresar al castillo, pero con orgullo continua el paso, pero aquel día la sombra de un hombre la perseguía, aunque miraba ella no veía a nada, pero sentía como la seguía cada día, luego de un mes sin comer y sin detenerse, con los labios partidos por el frió los pies sucios y las piernas rasguñadas, con el pelo sin brillo, cayó al suelo perdiendo la conciencia, pensó que había muerto, pero abrió los ojos y estaba en el castillo, nuevamente con su vestido rojo la cara limpia y los pies curados, el la abrazaba y le lloraba en el pecho pidiéndole perdón....

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